1656, óleo sobre lienzo, 560 x 369 cms, catedral de Sevilla.
Comentario de la obra «San Antonio de Padua con el Niño» de Murillo
Este cuadro, el más grande de Murillo, fue pintado para la capilla bautismal de san Antonio de la catedral de Sevilla. Se halla en su emplazamiento original después de haber aparecido recortada la figura del santo en noviembre de 1874.
Apenas dos meses después de que la noticia y la descripción del fragmento fueran hechas públicas, el trozo robado fue ofrecido a un anticuario de Nueva York, que reconoció la pieza y se puso en contacto con el cónsul de España.
En febrero de 1875 el fragmento, tras su restauración, fue reinsertado en el lienzo. Aún hoy se aprecian a simple vista las uniones.
La escena narra el episodio en el que al santo franciscano san Antonio de Padua, de viaje por Francia, se le aparece el Niño Jesús y descansa en sus brazos.
Murillo recrea en esta obra el más elaborado y exquisito de todos sus rompimientos de gloria, dominado por la figura del Niño, que se dirige hacia el santo, flanqueado por un espectacular séquito de ángeles que le señalan el camino.
Se conservan varios dibujos preparatorios para la realización de los ángeles, que revelan el detallado esmero con el que se concibió la obra. La gran variedad de posturas y complicados escorzos, así como la elegancia de algunas figuras, como el ángel adolescente de alas desplegadas, dan buena prueba de ello.
En la parte inferior del lienzo, en una lujosa estancia con un espléndido bodegón de una mesa a contraluz en primer plano, san Antonio espera arrodillado y en éxtasis el divino encuentro.
Es en la eficaz transición entre el rompimiento de gloria y el espacio arquitectónico terrenal donde reside gran parte de la belleza y maestría del cuadro.
El contraste entre el celaje con ángeles y el espacio holgado que rodea al santo no resulta en absoluto artificioso, y contribuye a enfatizar el eje diagonal que organiza la composició.
Es éste además el primer cuadro de Murillo en el que verdaderamente hay un interés por crear un espacio tridimensional ilusorio inédito en su producción.
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