Paisaje con la caída de Ícaro

Información de la obra Paisaje con la caída de Ícaro:

El cielo, el mar y la costa caracterizan el cuadro como un paisaje marítimo. Pero el claro escalonamiento de los tres planos marcados de izquierda a derecha por el labrador indiferente, por el hombre que estira la mano al borde del mar conduce la mirada hacia las piernas y las alas de Ícaro, las cuales surgen del agua a una escala muy reducida y rompen el orden aparente del cuadro.

Este genial uso del detalle y de la anécdota está vinculado al sentimiento trágico de la existencia. La obra de Brueghel juega así con la aplicación de diferentes registros: este tratamiento de un tema mitológico evoca, de hecho, la cuestión cristiana del pecado original.