Hacia 1515, escultura en mármol, 235 cm de altura, San Pietro in Vincoli, Roma.
Miguel Ángel tenía treinta años cuando, en 1505, Julio II le encargó su tumba. Fue un encargo glorioso, promesa de una carrera brillante, pero resultó emponzoñado.
Miguel Ángel trabajó durante cuarenta años en este proyecto, que concluyó a principios de 1545, treinta y dos años después de la muerte del papa.
Mientras tanto, tuvieron lugar un sinfín de conflictos con los herederos, los cambios de orientación de la política artística pontificia, rechazos y refundiciones de los proyectos.
Miguel Ángel no realizó finalmente más que tres estatuas para esta gran obra, entre ellas este «Moisés » cuya cólera parece estar latente bajo una calma aparente y majestuosa.
Freud vio en esta imagen de cólera reprimida la expresión de los tormentos personales experimentados por Miguel Ángel frente a su obra.
